El Gobierno bonaerense espera un “impacto fuerte” de casos positivos de Covid-19 días después de las fiestas, y podría imponer restricciones si la suba genera un estrés de su sistema sanitario, adelantó este sábado el ministro de Salud Nicolás Kreplak.
El funcionario evaluó los últimos registros con un grupo de treinta especialistas y aseguró que la información suministrada diariamente por Nación puede que tenga “un delay”, por lo que observó que una vez concluida la fiesta de Año Nuevo los infectados aumenten en los días posteriores.
“Todavía no hay un impacto fuerte en cuanto a la ocupación de camas de terapia; pero puede ser que haya un delay. Posiblemente dos semanas después de las fiestas tengamos un impacto fuerte en internación”, advirtió el titular de la cartera sanitaria provincial.
Sobre esa misma conclusión, aseguró que en el territorio “va a haber un aumento de internaciones, va a haber aumento de fallecimientos por el aumento de los casos”.
“Espero que no sea tan fuerte como para estresar el sistema que ya está bastante tenso por casos no Covid que eran necesarios atender. Si eso sucede, se evaluarán las medidas a tomar”, afirmó Kreplak.
El Ministro remarcó al mirar la curva de contagios su máxima preocupación es el “enorme aumento de los casos y la dinámica que tomó la pandemia”.
“No sabemos cuándo va a frenar ni la capacidad que tenemos para tomar medidas que hagan frenar los contagios”, expresó.
Ante esta situación, llamó a la población a “insistir con la vacunación” y no abandonar “las medidas personales como el uso de mascarillas y el lavado de manos”.
Consultado sobre la variante Ómicron, aseveró que “todavía” la Provincia no detectó ningún casos pero que “en las últimas horas aparecieron algunos casos sospechosos, pero no están secuenciados”.
“Por eso, al día de hoy, no hay casos positivos. En la provincia de Buenos Aires la variante prominente es la Delta”, sostuvo.