Dado que el desarrollo de biodigestores es una alternativa de manejo de desechos que permite convertir los pasivos ambientales en energía, el Grupo Riccillo, dedicado a la producción intensiva de carne porcina, bovina y aviar, está enfocado en la conversión de sus sistemas en espacios productivos ambientalmente sustentables.
Como parte de los avances del proyecto, la firma saladillense logró la certificación bajo normas IRAM – ISO de la planta bioeléctrica de General Alvear.
“La gestión ambiental es una herramienta que permite que se controlen todos los aspectos que pueden minimizar e incluso eliminar todos los impactos que generen las actividades llevadas a cabo por la organización”, indicó el titular del Grupo, Antonio Riccillo.
Un sistema de gestión ambiental basado en la norma ISO 14001, facilita que una organización controle todas sus actividades, servicios y productos que pueden causar algún impacto sobre el medio ambiente, además ayuda a minimizar todos los impactos ambientales que generan su operación.
