
El presidente Alberto Fernández justificó este martes la decisión de cerrar por 30 días las exportaciones de carne para intentar contener el fuerte aumento de los precios internos, y tras criticar el paro del campo, afirmó que se debe “poner orden” en ese mercado.
“Tuve que explicarles a los exportadores que el tema de la carne se desmadró, claramente”, afirmó Fernández, quien el lunes se reunió con representantes del sector. Aseguró que tienen que “poner orden en quienes exportan” y habló de prohibir que en el Mercado de Liniers se venda carne para la exportación.
El Gobierno anunció este lunes el cierre de las exportaciones de carne por 30 días para contener el precio interno luego de la suba del 65% del precio en las carnicerías en el último año.
Según le comunicó el propio Fernández a Mario Ravettino, titular del Consorcio ABC, que reúne a todos los frigoríficos exportadores, mientras dure el cierre, el Gobierno instrumentará un conjunto de medidas de emergencia tendientes a ordenar el funcionamiento del sector.
Según explicó el Presidente, el incremento del precio interno de la carne se debe a que “muchos exportadores que venden a China van y compran en el Mercado de Liniers. Entonces ahí prevalece el precio de exportación, que es el que más paga. Eso solo tergiversa el mercado interno”.
Además, rechazó que una liberalización del mercado sea la solución para el sector: “Si uno mira el escenario de 2015 y el que recibimos en 2019, lo único que se ve es que se le dio una total apertura al sector pero no aumentaron la cantidad de toneladas faenadas, no aumentaron la cantidad de cabezas, cada vez es menor el peso del novillo que se faena. Lo único que aumentó fue el precio de la carne. Esto quiere decir que la apertura y la libertad no es verdad que favorece a los mercados, favorece a los más poderosos, en este caso, del que produce”.
En este sentido, Fernández se refirió a que es “llamativo” que el precio aumente mientras la demanda baja, y se coloca entre los peores períodos de las últimas décadas. “Hoy estamos consumiendo el nivel más bajo de carne. Crecen los precios sin parar. Eso lo tenemos que corregir. Tenemos que poner orden en quienes exportan, en el Mercado de Liniers. No es posible que ahí se venda carne para la exportación”, apuntó.
También el mandatario aprovechó para criticar a la Mesa de Enlace de las organizaciones del campo que definió ir a un cese en la comercialización de todas las categorías de hacienda durante ocho días. “Es la única reacción que tienen”, lanzó, y explicó que en la reunión que tuvo con los frigoríficos exportadores recibió propuestas que se comprometió a aplicar.
En ese sentido, dijo que se habló de que solo puedan exportar los frigoríficos que se han dedicado a la exportación y “volver a los consumeros al mercado interno”.
Finalmente, cuestionó la política del ex presidente Mauricio Macri al afirmar que “abrieron todo para nada”. Y añadió: “Uno de los secretos para producir ganado vacuno es que uno no mate vientres para faenar y que el peso no sea menor a los 260 kilos. Eran 224 kilos con Cristina y 225 kilos con Macri. ¿Qué política de crecimiento aprovechó el gobierno anterior? El precio del asado en 2015 era $ 77 y en diciembre de 2019 era 300”.