Una manifestación en reclamo de justicia llevaron adelante este sábado por la tarde/noche, frente al Palacio municipal de la ciudad de 25 de Mayo, familiares, amigos y vecinos de Alejandra Massimini, fallecida el pasado 5 de octubre en su casa por una descompensación cardíaca, minutos después de haber sido interceptada por un operativo de tránsito donde, de acuerdo a diferentes versiones, habría sido víctima de un abuso de autoridad.
Cerca de doscientas personas se reunieron a las 18 horas en calle 27 entre 9 y 10, frente a una de los accesos al Municipio, encabezando la marcha y el pedido de “¡Basta de impunidad!” el propio esposo de Massimini, Franco Beltrán, sus hijos Gisela y Enzo, su madre, el abogado de la familia Santiago Madlum, entre otros.
Apenas iniciada la movilización, donde se escucharon fuertes críticas hacia el desempeño del personal de Tránsito municipal, y se solicitaba la presencia y explicaciones del Intendente y funcionarios, Beltrán y Maldlum fueron convocados por el titular de la Comisaría Primera comisario Daniel Buzada, quien los invitó a mantener una reunión con Hernán Ralinqueo, quien se encontraba en su despacho.
Este encuentro con el mandatario comunal se extendió por más de una hora y media, lo que generó malestar en gran parte de la gente que, por las demoras, se acercó a la ventana de la oficina del jefe de gobierno para hacer sentir su descontento, obligando a la salida presurosa del abogado para pedir tranquilidad a los manifestantes, sumándose entonces al encuentro con Ralinqueo los hijos de Massimini.
Tras finalizar el cónclave, Beltrán y Gisela Castro hablaron con la prensa y los vecinos que todavía permanecían frente al Palacio municipal. “Se pusieron a disposición y nos dijeron que están investigando las causas, pero que hay testigos que no quieren declarar, y que los van a buscar”, dijeron, señalando además “un llamado que recibimos que la Fiscalía por la autopsia, donde nos señalaron que no hacía falta porque no había sido un crimen”.
“Hay testigos que van a ser llamados, incluso uno que dice haber visto que (a Alejandra) le pegaron un codazo”, dijo el marido. “Necesitamos que mi mamá descanse en paz y que se vaya toda esa gente que causa estos maltratos”, afirmó Gisela, remarcando que “mi madre no estaba enferma. ¡Quiero que me den una respuesta y que saquen a toda esa gente! ¡Pero que no nos mientan!”.
“Acá hacen los operativos donde no hay cámaras, para que después la gente no pueda reclamar si es que pasa algo”, criticó Beltrán, afirmando además que “es mentira que mi mujer fue interceptada en calle 9 entre 24 y 25”. En tanto Enzo pidió “que no haya más Alejandras. Venimos a pedir una respuesta y si no la tenemos, vamos a volver”.
