Luego del triunfo de la Selección Nacional en la final de la Copa América ante Brasil, rompiendo con 28 años de sequía de títulos, los saladillenses se echaron en masa a celebrar el título al centro de la ciudad una vez finalizado el partido.

Muchos en caravana de autos y otros a pie, con banderas y camisetas argentinas, una verdadera multitud se reunió en la tradicional esquina de Moreno y Rivadavia frente a la plaza principal para festejar el nuevo título.

Más allá de las restricciones por la pandemia, la euforia y el desahogo por 28 años de espera pudo más, y no se vio distanciamiento social aunque si uso de barbijo en su mayoría.